¡Hola! Seguimos dándote las mejores recomendaciones para tener una página web efectiva e interesante que se convierta en un canal efectivo de comunicación con tus usuarios. Hemos hablado de la importancia del contenido, cómo hacer los textos o cómo enfrentar la estructura.
Esta vez hablaremos de un aspecto mucho más técnico pero igualmente importante: los estándares web. Esos lenguajes, tecnologías y protocolos cuyo objetivo es optimizar el potencial de Internet.
Si vas a tener una página web, necesitarás estándares web
Te explicaremos por qué:
- Los estándares web son reglas normalizadas por el Consorcio World Wide Web (W3C) que establecen la base para que tanto los elementos hardware como software tengan la adecuada compatibilidad para alcanzar una red eficiente y accesible.
- Cuando alguien visita tu página web y no puede ver normalmente lo contenidos o no puede cambiar el tamaño de la fuente a riesgo de que la imagen se desestructure, es porque no sigues estos estándares.
- Cuando sin importar el navegador que el usuario utilice los elementos de tu página web no se ven o funcionan deficientemente, necesitas seguir estándares web
- Esto ocurre porque las tecnologías web deben ser compatibles para permitir un acceso conjunto de todos los hardware y software.
Tener una página confiable, segura, accesible y sencilla de usar, depende de la aplicación de estos elementos. Y lo mejor es que son tecnologías abiertas y de uso libre realmente indispensables actualmente.
Entre las medidas de comprobación de estándares destacan:
- Uso de un correcto Doctype
- La utilización de un código HTML válido
- La revisión de los posibles enlaces rotos
- La revisión de los posibles errores de JavaScript
- La utilización de un código CSS válido para tipografía, márgenes, colores o bordes
- El análisis de respuesta de tu página en términos de velocidad y peso